El ataque iraquí a barcos iraníes en el Golfo Pérsico (1984) – Escalada en la Guerra Irán-Irak

El 2 de enero de 1984, en plena Guerra Irán-Irak (1980-1988), la Armada iraquí lanzó un ataque sorpresa que destruyó cinco barcos iraníes en el Golfo Pérsico. 

Esta ofensiva marcó una peligrosa escalada en el conflicto, extendiendo la guerra al ámbito marítimo e intensificando las amenazas al tráfico petrolero global en una región estratégica para el mundo.  

Contexto: La "Guerra de los Petroleros"

- Irak, en desventaja terrestre frente a Irán, buscó asfixiar económicamente a su rival atacando su infraestructura petrolera.  

- El objetivo era bloquear las exportaciones iraníes, vitales para financiar su guerra.  

- El ataque del 2 de enero fue parte de una campaña más amplia que llevó a la destrucción de más de 400 barcos civiles durante el conflicto.  

Impacto regional y global 

- Riesgo para el comercio mundial: El Golfo Pérsico era (y es) crucial para el suministro global de petróleo. Los ataques dispararon los seguros marítimos y pusieron en alerta a potencias como EE.UU.  

- Intervención internacional: En 1987, EE.UU. y otras potencias desplegaron fuerzas navales para proteger buques neutrales, temiendo una crisis económica. 

- Tácticas brutales: Irak e Irán atacaron indiscriminadamente petroleros, incluso con misiles Exocet (usados por Irak con apoyo occidental).  

Legado de una guerra olvidada 

- La "Guerra de los Petroleros" mostró cómo los conflictos regionales pueden amenazar la economía global.  

- Dejó lecciones sobre la vulnerabilidad del transporte marítimo, relevantes hoy con las tensiones en el estrecho de Ormuz.  

- Fue un precedente de la militarización del Golfo, que sigue siendo un polvorín geopolítico.  

En conclusión, aquel ataque del 2 de enero de 1984 no fue un hecho aislado, sino parte de una guerra total donde hasta los buques civiles fueron armas. Un recordatorio de que, en el Golfo Pérsico, el petróleo y la guerra siempre han estado entrelazados.